VIERNES DE AGRADECIMIENTO
Dios
nunca actúa en respuesta del comportamiento del hombre, no hay nada que el
hombre pueda hacer para ganarse el favor de Dios; porque el hombre es de carácter,
modos y naturaleza diferente a Dios, por esta forma de ser de el hombre y que
nunca, de ninguna manera y bajo ningún motivo el hombre lo puede cambiar; es
que Dios dio leyes para mostrarle al
hombre cuán lejos está de poder vivir bajo los valores de Dios, entonces Dios
da de su gracia para que el hombre pueda recibir de las bondades y disfrutar de
la justicia de Dios.
Entiende bien que eres un pueblo terco, y que tu justicia y
tu rectitud no tienen nada que ver con que el señor tu Dios te dé en posición
esta buena tierra Deut 9;6 NVI
Moisés con estas palabras le recuerda a su
pueblo que están a punto de recibir el regalo que están esperando por muchos
años de parte de Dios y que al fin se va a consumar la promesa que Dios les había
dado de hacer de ellos una nación libre, pero antes re recibir este regalo, Moisés
quiere que quede bien claro quienes son ellos, quien es Dios y por que es que
van a recibir ese regalo.
lo primero es; reconoce que tu eres un
pueblo terco, siempre que nos acercamos a Dios tenemos que hacerlo reconociendo
que nosotros somos seres imperfectos, esto es muy importante para nuestro
diario vivir, ya que esta condición nos pone en humildad constante y no nos
deja pensar mas de nosotros mismos, sino en la justa condición en la que nos
encontramos y es que cuando miramos a Dios y lo buscamos o reconocemos su amor
y su cuidado no hay ningún merito que nos ponga en un nivel diferente a los demás,
también esto nos enseña a no esperar mucho del hombre aunque este hombre halla
logrado los más grandes estándares de rectitud en la vida, siempre habrá un
motivo o alguna condición que haga que este hombre muestre su condición humana
y deficiencia; por otro lado el reconocer nuestra debilidad nos permite estar
siempre esperando y dependiendo de Dios.
Por
lo tanto tu conducta, rectitud y justicia no tienen nada que ver con lo que el
señor te da; hay dos
tipos de personas, los que no buscan ni tienen el temor de Dios, y los que
buscan constantemente agradarle, estas palabras están dirigidas a todos los
hombres sin importar si buscan a Dios o no lo buscan, ya que Dios en su
misericordia no hace distinción ni clasificación de personas, primero Dios nos
da la vida y nos permite vivir, después Él da sus mandamientos para que el
hombre disfrute una buena calidad de vida, apegándose y viviendo conforme a los
valores que dan paz y rectitud, estos mandamientos los dio para todo ser humano
que forma parte de la creación de Él, es decisión del hombre si se somete a los
lineamientos de Dios o no, y por ultimo sin importar si decides o no vivir bajo
las leyes de Dios, Él nos regala la vida eterna por medio de su hijo Jesucristo,
una vez más sin tomar en cuenta la condición, pensamiento o actitud del hombre.
Nuestra
respuesta a Dios es solo aceptar nuestra condición y reconocer el glorioso
camino que Él tiene para nosotros simplemente como regalo, por su amor y
misericordia.
Esta
forma de actuar de Dios nos hace vivir constantemente agradecidos con él como
forma de reconocimiento a su grandeza, amor y justicia; pero también en
reconocimiento que no somos dignos de merecer nada por nuestra condición humana,
pero que a través de nuestro reconocimiento y agradecimiento podemos vivir
cerca de Él.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario